No se que tiene el otoño que nos anima a irnos a pasear por los bosques que tenemos mas cerca o mas lejos, el caso es ir a un bosque, pero sinceramente creo que es por el colorido que hay en ellos en esa época del años en el que las hojas van cambiando su color paulatinamente antes de llegar a caer y eso hace que haya una paleta de colores difícilmente igualable, así que nosotros también hemos optado por esta opción, pero no fuimos a un bosque cualquiera, fuimos a la Ruta de los Castaños Centenarios en la Metrópoli Verde, ahí es nada.
La Metrópoli Verde es una zona dentro del Parque Natural Montes Obarenes San Zadornil, donde los árboles toman un protagonismo y tienen unas dimensiones... que lo llaman el Nueva York de los Bosques.
Llegar hasta San Zadornil se hace un tanto entretenido por una agradable y bonita carretera que cruza el valle alavés de Valdegovía y poco antes de llegar al pueblo nos encontramos con una cartel que nos da la bienvenida al Nueva York de los Bosques.
Llegamos hasta el aparcamiento que hay frente a la Casa del Parque y otro cartel elaborado en madera nos recuerda que nos encontramos en la Metrópoli Verde.
Así que dejamos el vehículo para entrar en la Casa del Parque para saludar a María y recabar información sobre la ruta que queríamos hacer. Estaba lloviendo y el paraguas se nos hace imprescindible.
María es la persona que atiende a los visitantes de forma amable y facilitando todo tipo de información del Parque Natural Montes Obarenes San Zadornil en general y de la Metrópoli Verde en particular y se nota que le gusta lo que hace y transmite pasión en sus explicaciones, como podrás escuchar en el vídeo que hay al final del reportaje.
Dentro nos calentamos un poco sentados en los cómodos pub que hay en una parte de la estancia y al calor de la chimenea, lo cual se agradece en mañanas como la que nos ha salido, pero tranquilos que luego levanta y deja de llover.
Dando tiempo a que escampara nos dedicamos a ver la casa y a leer los paneles informativos que hay para entender y conocer mejor el entorno en el que nos vamos a mover a lo largo del día y aunque no era la primera vez que veníamos a este lugar no está mal refrescar la memoria.
Una buena colección de bicicletas eléctricas tienen a disposición de quien las quiera alquilar para darse una vuelta por los distintos caminos del entorno al precio de 18 euros por todo el día y 12 por medio día y la Casa del Parque está abierta hasta primeros de diciembre todos los días y a partir de ahí solo abrirá los viernes, sábados y domingos hasta la semana santa, que volverá a abrir todos los días.
Pues te vamos a mostrar una sencilla ruta de senderismo sin ninguna complicación y asequible para toda la familia, la Ruta de los Castaños, para ello nos fuimos a cercano pueblo de Arroyo de San Zadornil y aparcamos junto a la iglesia y la bolera cubierta, vamos en el centro del pueblo y siguiendo la calle que sube hacía el monte desemboca en una amplia pista, que nos indica el camino a seguir.
El primero que nos salió a "saludar" diciéndonos que él estaba trabajando al cuidado de un rebaño de ovejas, fue un enorme mastín, precioso.
A lo largo del recorrido en los distintos cruces que encontramos hay varios letreros que nos indican el camino a seguir e incluso alternativas, que en este caso es mas corta, pero como dice el refrán no hay atajo sin trabajo y decidimos seguir por el camino largo, pero mas tendido. Luego utilizamos este atajo para la vuelta.
Fuimos viendo varios castaños a lo largo del camino, que nos indicaban lo que veríamos al llegar al barrio de los castaños.
Hacía un rato que habíamos dejado las ovejas atrás y nos encontramos con unos terneritos que nos miraban como las vacas al tren. Que salados ellos.
Pero lo que vimos un poco mas adelante, no lo habíamos visto nunca, una vaca con los cuernos torcidos hacía abajo y atrás. Vamos, que mocharte no te mochará, pero el "empujón" que te puede pegar...
Después de dejar la pista principal que sube hasta el barrio de las secuoyas, tomamos un camino a la derecha, perfectamente indicado por los letreros y mira por donde estaba el posible padre de los terneros de antes. Un enorme toro blanco, que estaba pastando entre la hojarasca.
No vimos jabalíes, pero si vimos donde habían estado hozando, dejando la huella perfectamente reconocible de la tierra removida con su hocico.
Los acebos que fuimos viendo estaban pletóricos, con las gotas de agua colgando de los frutos que les daba un color y un olor especial (es lo que tiene la lluvia). Había acebos que habían dejado de ser arbustos para convertirse en verdaderos árboles de una altura considerable.
Desde que dejamos la pista principal el camino es prácticamente llano, ya que la altura ya la habíamos ganado con anterioridad y la alfombra de hojas se mostraba ante nuestros pies.
Las castañas en el suelo entre las hojas se dejaban ver con su caparazón abierto, cada vez mas habituales, lo que nos indicaba que nos estábamos acercando a nuestro objetivo del día.
Y por fin llegamos, después de hora y media a paso tranquilo disfrutando del entorno. Las formas que tienen sus cuerpos y las ramificaciones, los hace mas espectaculares.
El barrio de los Castaños Centenarios se encuentra en un vallejo muy bien protegido y vamos viendo los viejos árboles a izquierda y derecha del camino...
...por laderas apenas pronunciadas.
Yo creo que nunca había sacado tantas fotos en formato vertical, pero es que no cabían los árboles en el formato horizontal y no había margen para alejarse.
Uno de los ejemplares, había dejado una enorme cicatriz en el suelo.
Los viejos ejemplares comparten vallejo con...
...otros mas jóvenes.
Todo el suelo está lleno de erizos de las castañas, como para caerte de culo.
Ruta totalmente recomendable y no solo en otoño, la cantidad de rutas y senderos que hay en la Metrópoli Verde hacen de este lugar una zona muy atractiva, para los amantes de la naturaleza, para pasear, para hacer senderismo, para afotar, para... un sinfín de posibilidades y todas ellas muy asequibles, para todo tipo de personas.
La vuelta la hicimos por el camino mas corto, pero con una considerable bajada, pero mucho mas rápido y con unas buenas vistas de los farallones rocosos de enfrente.
En este vídeo puedes escuchar a María como nos explica sobre algunos de los lugares que podemos ver en la Metrópoli Verde y puedes hacer la Ruta de los Castaños Centenarios con nosotros, así que te invito a que subas el volumen y le des al play.
Y por si no ubicas bien donde se encuentra la Metrópoli Verde, te dejo este mapa, donde puedes localizar San Zadornil, la localidad donde se encuentra la Casa del Parque Montes Obarenes San Zadornil y donde puedes recibir toda la información necesaria.
Iremos mñn, tiene muy buena pinta 👍
ResponderEliminarEn la Metrópoli Verde tienes rutas para todos los gustos. Verás que zona más bonita.
ResponderEliminarSaludos
Hola! Tiene muy buena pinta...cuántos kms tiene la ruta? Para ir con niños de 5 y 9 años,son andarines pero depende del día, jejeje...muchas gracias!
ResponderEliminarMuy buenas, pues no te sabría decir los kilómetros pero nosotros echamos la mañana entre la visita a la Casa del Parque y la ruta.
ResponderEliminarNo es especialmente larga ni dura ya que la mayor parte va por pista que se anda muy bien.
Yo creo que la podéis hacer perfectamente.
Saludos
Me ha gustado.mucjo vuestra explicación y las fotos. Gracias por la recomendacion
ResponderEliminarEs una zona de Burgos preciosa con una Naturaleza exuberante. Saludos
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