Camino de Santiago, Vía de Bayona entre Tolosa y Basain

El domingo pasado nos fuimos a hacer una etapa del Camino de Santiago por la Vía de Bayona, entre las localidades guipuzcoanas de Tolosa y Beasain, unos veinte kilómetros del ala.

Lo organizaba la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Burgos y los de Briviesca nos apuntamos al carro.

Once peregrinos fuimos los recogidos por el autobús al pasar por Briviesca y a las diez y media de la mañana, que junto con los que venían de Burgos, lo llenamos por completo.

Antes de comenzar en Tolosa, había que hacer una foto a esta estampa de baile tradicional vasco, poco antes de cruzar por el río Oria. 

Esta etapa es francamente cómoda y transcurre fundamentalmente por un carril bici, muy bien indicada, tanto con señales como con flechas amarillas.

Durante un buen tramo vamos por la orilla de este canal por un lado y el río Oria por el otro, lo cual se agradece, ya que el día apuntaba una buena temperatura, aunque si un poco de viento que se hacia molesto.

Para cuando quisimos darnos cuenta, ya estábamos en Alegia, un pueblo con un casco antiguo muy agradable, con edificaciones típicas de la zona.

Pequeños claustros como éste de la iglesia parroquial...

...o viviendas con las vigas de madera a la vista y de colores vistosos.

En un pispas lo cruzamos y por el camino nos íbamos encontrando con estas criaturitas que salían a saludar...

...o estas otras que estaban a sus menesteres. El cordero que quería mamar y la oveja que no le dejaba. Vaya entretenimiento que tenían.

O estos dos corderitos que estaban tumbados al sol con los ojos cerrados.

Y llegamos a Legorreta y se nos antoja que ya es hora de almorzar. El bocadillo con una cervecita del bar de alado entra que no veas.

Todo el pueblo tenia bolsas de basura colgadas de los árboles, balcones y demás lugares de donde se pudieran colgar. Pregunté el motivo y me dijeron que era una forma de protesta contra la manera de recogida de basura selectiva, sacando cada día de la semana una cosa. Un día la biológica  otro día el papel, otro día el plástico, otro...

Cinco kilómetros mas y estamos en Ordicia, ante el monumento al navegante Andrés de Urdaneta, que descubrió una ruta marítima entre Filipinas y Méjico. Al fondo se ve al cumbre del mítico Txindoki.

La plaza Mayor de Ordicia, donde se celebra el mercado semanal y que cuenta desde 1.925 con estos pilares con sus capiteles y se cubrió.

Algunos establecimientos tienen una forma original de anunciarse con el consiguiente "cartel".

La torre de la Iglesia de Santa María de la Asunción, que data del siglo XVIII.

Y llegamos al final de la etapa, Beasain. Este era el lugar elegido para terminar la etapa y para degustar un buen menú de sidreria, a base de tortilla de bacalo, ensalada, y entrecot.

No, en el edificio que se ve en la foto, no; éste es el Ayuntamiento.

Un bonito templete, marca el centro de la plaza.

Y la iglesia parroquial, bien en lo alto, justo enfrente de la sidreria donde degustamos un buen menú.

¿Que seria del caminante sin unas buenas viandas?

Por la tarde, regreso a casa con un buen sabor de boca, tanto por los lugares recorridos en la etapa del Camino de Santiago por la Vía de Bayona, como por los compañeros con los que hemos compartido la jornada.