Segundo Instameet en Balmaseda

Como pasa el tiempo de rápido y vamos al segundo instameet en Balmaseda, organizado por el portal  de turismo Balmaseda y tu, que de nuevo ha organizado una jornada de primera categoria y nos lo ha hecho pasar en en grande conociendo cada rincón de la villa mas antigua de Bizkaia... Balmaseda.

En esta ocasión habíamos quedado mas pronto, así que nos tocó madrugar, ir a preparar la putxera balmasedana, bien valía la pena el esfuerzo y escuchar las explicaciones del experto chef en putxeras Iñaki Saratxaga.

Teniendo en cuenta de que nuestra primera actividad del día iba a ser preparar la putxera, nada mejor que quedar junto a la putxera gigante que se encuentra al lado del frontón municipal de Balmaseda.

Como puede verse en la foto, hay una máquina de tren grabada y el motivo no es otro que esta forma de cocinar la comida viene de los largos viajes en tren entre La Robla (León) y Bilbao, para transportar el carbón de las minas a los altos hornos y como el viaje era tan largo se comenzó a utilizar esta pucheras llamadas ferroviarias y que se colocaba en su interior el carbón de la máquina del tren para poder calentar y cocinar las comidas con el propio traqueteo del tren.

Pues nada, encendimos el fuego, echamos las alubias, los sacramentos, la salsa y esperamos a que la llama desapareciese, es imprescindible el fuego lento, mientras hicimos fotos y escuchamos a Iñaki, que fue muy amable y tuvo mucha paciencia con lo cansos que nos ponemos con las fotos.

Ahora a esperar cinco horas para podérselo comer. Nos vino a buscar Paloma del Museo de Historia de la Villa de Balmaseda para hacernos de guía por la villa y comenzamos en la iglesia de San Severino.

Una iglesia del siglo XV y aunque es gótica cuenta con elementos barrocos que la adornan.

De las capillas que tiene me llamó especialmente la atención la del Santo Cristo de la Misericordia, con el impresionante retablo.

Visita obligada es junto a la iglesia de San Severino es la Casa Consistorial y su planta porticada que recuerda sin poder evitarlo a una mezquita.

La vista desde dentro de los arcos da a la plaza. 

Y desde la plaza de San Severino se aprecia la fachada del edificio barroco y que fue construido en el siglo XVIII basado en el modelo castellano montañés.

Pasamos de nuevo por el Pintxo i Blanco, para ver como andaba la putxera... ya comenzaba a tomar color...

...y a falta del traqueteo del tren, Iñaki, le dio unos meneitos.

El reloj calendario solar, es una obra de setenta toneladas de peso y que marca las horas y los meses con precisión y que llama muy especialmente la atención el sistema de medición.

La torre de la iglesia de San Juan del Moral, nos deja un bonito contraluz, antes de entrar en la biblioteca municipal...

...que se encuentra en las antiguas escuelas de la villa, totalmente adaptada.

Al salir de la biblioteca y antes de entrar en el Museo de Historia me acerqué al río Cadagua para retratar al puente viejo y su reflejo en las aguas del río. No se podía desaprovechar esa ocasión.

Una vez dentro de la iglesia de San Juan del Moral que alberga el Museo de Historia de la Villa de Balmaseda, Paloma continuó con sus explicaciones viendo la evolución de la villa hasta nuestros días.

Distribuido en varias zonas muestra los personajes, la evolución industrial, el incendio de la villa por parte de los franceses.

El museo es uno de los lugares preferidos por los turistas al llegar a Balmaseda.

La visita obligada al "photocall" de Balmaseda y la foto de grupo...

...y la foto del puente viejo a través de la b.

Aún nos quedaba ver el Museo de la Pasión Viviente Villa de Balmaseda, que se encuentra en la iglesia del Monasterio de Santa Clara cuyo conjunto monumental ahora está dedicado a la hostelería, y a vivienda particular, salvo dicha iglesia.

Aquí nos despedimos de Paloma y tomó el relevo David, que es el encargado de explicar lo que acontece en el Museo de la Pasión Viviente.

Aquí se pueden ver algunos de la trajes que se utilizan en la Pasión Viviente y algunos de los pasos que procesionan en la Semana Santa.

Algunas tallas son excelentes como es el caso de este ecce homo.

Se puede visitar durante todo el año de martes a domingo por la mañana y el viernes también por la tarde.

Y llegó el momento del descanso y nos fuimos a tomar el vermú, comenzando por el lugar que teníamos mas cerca, el propio monasterio de las clarisas y así de paso entramos a verlo.

Llegada la hora de comer de nuevo volvimos al Pintxo i Blanco y allí estaba Iñaki, probando la putxera para darle el toque final...

...otro meneito...

...y al plato. Vaya pinta y lo buenas que estaban acompañadas por las gildas...

...y los sacramentos. Fue el momento de guardar los móviles y dejar de hacer fotos. Había que dar buena cuenta de este manjar que teníamos delante.

Y de postre queso fresco con membrillo. Solo nos faltó la siesta.

Con una sobremesa larga, charlando y aprendiendo de la historia de Balmaseda con el erudito Txomin Etxebarria, escritor de varios libros sobre la historia de la villa y con Miguel Sabino de Karrantza, otro erudito e investigador de las tradiciones y cultural del valle. Fue un placer compartir mesa y mantel con ellos.

Por la tarde nos esperaba el Palacio Horkasitas en pleno casco antiguo de Balmaseda y que da a dos calles, que recoge las obras de ArteKalea en sus jardines y en el interior.

Una muestra de arte y escultura vasca y que nos fue explicando Leire, sala por sala.

Es curioso ver como este palacio se estaba restaurando cuando llegó la crisis de la construcción y ahora estando las obras paradas se utiliza para dar cabida a este tipo de arte y artistas.

Además de la muestra de escultura vasca, cuenta con Polonia como país invitado, contando con importantes artistas y con obras al menos curiosas e imaginativas como la que podemos ver en la foto de abajo teniendo que encontrar la perspectiva.

Cuenta con un patio interior rodeado de arcos, siendo uno de los pocos que se pueden encontrar en la villa.

Llegó el momento de hacer un poco el ganso y de la despedida, después de recibir el obsequio por parte de Mamen, organizadora del evento y que al igual que el año pasado nos dejó buen sabor de boca.

Volver a saludar a personas que conocimos el año pasado como José Miguel San Vicente, estupendo fotógrafo y excelente persona, a Jon Kepa Izaguirre, a Estibaliz, a Meme, conocer a Sergio y volver a saludar a Iratxe Estrada a la que puedes ver y seguir en su página Iratxe Estrada Comunicación, y a tod@s las demás.

Fue un placer repetir este año. Muchas gracias.