La otra noche pasé por Vitoria, ciudad a la que tengo un especial cariño y al pasear por la Plaza de la Virgen Blanca, también conocida como Plaza Vieja, del siglo XVII, era un arrabal, donde se organizaba el mercado extramuros y donde se encuentra el Monumento a la Batalla de Vitoria, no pude por menos que sacar la cámara.
Al fondo arriba, se ve la torre de la Iglesia de San Miguel del siglo XIV y parte de los arcos del pórtico que preside la plaza en el que hay una hornacina con la imagen de la patrona de la ciudad, la Virgen Blanca.