Bajábamos para Andalucía y no podíamos pasar de largo por La Mancha sin parar a visitar los Molinos de Viento, así que miramos en el mapa cual era el lugar que mejor nos venía para no desviarnos demasiado de nuestra ruta y decidimos que por volumen de construcciones mejor conservadas y porque nos pillaba en ruta sin tener que salirnos de ella mucho que íbamos a ver los Molinos de Viento en Consuegra.
El caso es que llegamos a Cerro Calderico dónde se encuentran los molinos y el castillo cuando más llovía, parecía que no hubiese un mañana y además con un viento fuerte que te impedía de todas todas utilizar el paraguas que siempre llevamos en la furgoneta, así que nos armamos de valor y nos dispusimos a mojarnos.
En un momento de respiro salieron del coche todos los que estaban cobijados para entrar en el único molino que vimos abierto y que se podía visitar como puedes ver en la primera foto.
El habitáculo es pequeño como procede a una construcción de estas características y con el pago de un euro cincuenta puedes entrar a ver el molino Rucio, que se encuentra al final de la carretera que te lleva a Cerro Calderico.
Una vez dentro puedes subir a al parte superior para ver la maquinaria y con un audiovisual ver el funcionamiento de la misma.
Los engranajes son de madera y la piedra de moler enorme y que debe de pesar un potosí.
La visita la hicimos por libre y prácticamente solos. No se cuanta gente puede caber, pero no mucha, aunque como la visita se puede hacer con rapidez, se me antoja que no hay que esperar demasiado tiempo.
El sistema de la molienda no es muy distinto al de otro tipo de molinos, pero tiene sus particularidades, como es lógico.
Al final del proceso sale la harina que se introduce en los sacos.
El día que pasamos por Consuegra era día de descanso de la Oficina de Turismo que se encuentra en el molino Bolero, así que te dejo el enlace a su web para que tengas toda la información posible.
El descanso de la lluvia duró poco y volvimos a quedarnos solos junto a los molinos que marcan el horizonte sobre el Cerro. Una imagen idílica con el Castillo de la Muela al fondo.
Nos pusimos como sopas a pesar de los chubasqueros, pero el viento no respetó ni un segundo y consiguió meter el agua por todos los huecos de nuestro cuerpo.
Doce molinos se conservan y cada uno de ellos con su nombre. Bolero, Clavileño, Caballero del Verde Gabán, Rucio o Espartero son los nombres de alguno de ellos.
En el castillo tuvo lugar la batalla de Consuegra en el año 1097 en la que murió el hijo del Cid Campeador.
El castillo que actualmente pertenece al Ayuntamiento, se puede visitar pero ya no teníamos el cuerpo para más agua y lo dejamos para mejor ocasión.
La decisión fue bajar al pueblo a tomar un café caliente que nos entonase un poco.
Está claro de que no lo pudimos ver y disfrutar como se merece, así que tendremos que volver para desquitarnos y no "cogerlo" de paso, sino a hacer una ruta por los molinos de viento de La Mancha para quitarnos la espinita que nos quedó.
Los molinos de Consuegra son muy bonitos, a nosotros nos gustaron mucho cuando pasamos, sobre todo a los niños.
ResponderEliminarNosotros también paramos alli a comer un bocadillo viniendo de Murcia. Era un dia nublado y con viento, pero pudimos hacer un montón de fotos, quedan fenomenal! Recuerdo que se podía entrar en uno de ellos, pero nos conformamos con los exteriores.
ResponderEliminarHola Familia, desde luego son muy bonitos y muy bien conservados, pero nosotros tuvimos mala suerte con el tiempo, pero las fotos quedaron muy bien a pesar de todo.
ResponderEliminarSaludos
Hola pareja, nosotros entramos en el molino que estaba abierto para verlo por dentro y fue el único momento de descanso del viento y la lluvia, pero las fotos quedaron muy chulas aunque yo no las tenía todas conmigo pensaba que saldrían movidas por culpa del viento que empujaba a base de bien.
ResponderEliminarSaludos
Que increible lugar.
ResponderEliminarHola Gladys, si que es verdad, parece que en cualquier momento van a salir Don Quijote y Sancho Panza por ahí.
ResponderEliminarSaludos