Pasear por el casco urbano de Molinaseca declarado Conjunto Histórico Artístico en 1975, te carga de paz y tranquilidad siendo uno de los puntos de paso más importantes del Camino de Santiago y eso se nota a cada paso que das por sus calles.
Además, Molinaseca es uno de los Pueblos más Bonitos de España en León y para que lo descubras si aún no lo has hecho, vamos a mostrarte una serie de datos y fotografías para que lo conozcas.
Antes de seguir adelante con el reportaje te puedes ver el siguiente vídeo que grabamos en nuestro paso por Molinaseca.
El día que estuvimos en este pueblo jacobeo regresábamos de Las Médulas, cuyo reportaje puedes ver y leer pinchando aquí y estábamos saliendo de la pandemia del covid, de ahí que hubiera poca gente por las calles ya que aún no se podía viajar entre comunidades y que en el vídeo aparezcamos con las mascarillas puestas.
El Puente Romano o Puente de los Peregrinos, se hace paso obligado para entrar o salir de la Calle Real y a través de él llegan los peregrinos que van camino de Santiago de Compostela, salvando el río Meruelo con este puente de siete ojos.
Se le atribuye origen romano dado que la vía romana que partía de Ponferrada (las minas de oro de Las Medulas, están al lado) pasaba por Molinaseca camino de Foncebadón.
Desde el mismo puente se divisa la Iglesia de San Nicolás de Bari y para llegar a ella, nada más entrar en la calle Real, dejamos ésta para subir un poquito, ya que se encuentra en lo alto de una loma.
La iglesia de San Nicolás de Bari es la titular de la parroquia y data de la segunda mitad del siglo XVII.
Una de las plazas que muestran la arquitectura popular de la zona es la plaza del Rollo (fotografía inferior), así como la plaza García Rey (primera fotografía del reportaje).
Pero sin duda alguna la calle en la que podemos ver la arquitectura popular en todo su esplendor es la calle Real, por la que pasan a diario cientos de peregrinos.
Las balconadas de madera, bien conservadas sobre fachadas de piedra.
Nos dimos cuenta de que nos dejábamos el Santuario de Nuestra Señora de las Angustias, así que volvimos sobre nuestros pasos para ir hasta él (también hay que subir un poquito) y como estaba cerrado no pudimos entrar.
Parecer ser que allá por el siglo XI ya existía una capilla en este mismo lugar. El actual santuario data de finales del XVII y principios del XVIII.
De regreso a la calle Real, también veremos varias casas nobiliarias con sus escudos de armas, algunas de las cuales se han reconvertido en alojamientos rurales.
Varios escudos declarados Bien de Interés Cultural (BIC) se encuentran en la casa nobiliaria Cangas Pambley.
Antes de llegar hasta la plaza donde se encuentra el Crucero del Santo Cristo y que da nombre a la plaza, aprovechamos para tomar un café en uno de los bares de la calle Real.
A simple vista podría parecer redonda la columna del crucero pero es si te fijas bien en la foto se puede apreciar que es octogonal y todo el conjunto es de granito.
Y llegamos al final del pueblo siguiendo el recorrido del Camino de Santiago, donde nos encontramos con el Monumento al Peregrino realizado en granito.
Molinaseca es un pueblo que no te dejará indiferente en una visita a su casco histórico, que además de estar en la Asociación de los Pueblos más Bonitos de España, está declarada Bien de Interés Cultural (BIC) como Villa de Molinaseca en Septiembre de 2021.
Me ha gustado mucho este pueblo y también me ha gustado veros🤗
ResponderEliminarPues si es un pueblo muy bonito. En lo de vernos supongo que te refieres en el vídeo, porque como eres Anónimo, no se me ocurre en este momento quién puedes ser. Saludos
ResponderEliminarMagníficos recuerdos de este bonito lugar, que cruzamos a pie en nuestro segundo Camino de Santiago. Inolvidable la relajante comida al sol en la terraza del restaurante que está prácticamente debajo del puente romano, a la entrada de la localidad. Un cordial saludo, viejo amigo bloguero.
ResponderEliminarQue alegría Alfonso, desde luego es un lugar a visitar bien de peregrino o bien de turista.
ResponderEliminarNosotros no llegamos a comer pero el el café junto a la plaza del Santo Cristo nos supo de maravilla.
Saludos