Volver a La Rioja para mi es como volver a mi casa, la tengo tan cerca en cuanto a distancia, pero sobre todo en cuanto a sentimiento, ahí tengo el 50% de mis raíces, si además lo hago para compartir afición y volver a ver a amigos para pasar el día como son los IgersGasteiz y Jungui ¿que mas se puede pedir?
La Rioja siempre es un lugar dulce, pero en época de vendimia lo es aún mas, ver los remolques llenos de uva que mas tarde se convertirán en mosto para pasar a ser un vino excepcional, además yendo con el Maestro Junguitu, todo se convierte en sabiduría y toma la categoría de arte, si es que no lo fuese ya.
Si sigues leyendo verás unas bodegas (en La Rioja se les denomina calados) del siglo XVI, verás vendimiar en la viña, veremos una bodega mas moderna y comeremos en el Portal de La Rioja, en la localidad de Briñas, pueblo que es muy posible que se convierta en una de las 7 Maravillas Rurales de España, al menos camino lleva puesto que ya es Toprural Maravilla de La Rioja 2017.